Pues aquí estoy, otro día más aguantando el mal humor que me sale todas las mañanas al lebantarme. No lo puedo controlar, será que por mucho que quiera negarlo, los genes maternos también me afectan.
El humor es bastante jodidillo, a veces me hacen gracia cosas que a los demás no les hace ni pizca, y otras tengo cara de marmota cuando los demás se están riendo , pero claro la cuestión está en si alguien me pregunta que me pasa, no tengo una respuesta coherente que darle . Bueno a mi hermana le tengo dicho, que con verle la cara ya me pongo de mala leche, lo que no está muy lejos de la realidad, pero ir soltando lindezas como esas a la gente no creo que me granjee muchas amistades.
Bueno pues que sepáis que me he puesto morena!! Pues si, aunque ya no contaba con ello tengo un morenito muy chulo, he dejado de ser la gemela de el muñeco de nieve. Por fin Lorenzo se ha dignado a aparecer por estos lares del norte, por cierto muy bonitos.
No sé cuanto durará , pero yo me doy por satisfecha con esta semanita de vagancia total y absoluta en la playa.
Pero claro, cuando se es vago, se hes vago para todo, así que mis lecturas no han avanzado mucho.
Por otro lado, la capulla de mi amiga Bea me ha metido el gusanillo, un gusanillo muy cabrón, de leerme la saga de Eve Dallas de la increíble y genial Nora Roberts, y bueno.. hoy tendré que hacerle una visita de urgencia a mi librería favorita, y luego vendré a preparar la maleta para cuando mi padre me eche de casa por desfalco.
Poco más que decir en esta soleada mañana, sólo que tengo que comprarle un regalo a mi hermana y no quiero!.
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