domingo, 25 de diciembre de 2011

Imagen en el Espejo de Sandra Brown

ARGUMENTO:

Solo dos personas sobrevivieron al accidente aéreo. Una de ellas Avery Daniels, irreconocible y con quemaduras por todo el cuerpo, fue identificada como Carole Rutledge, la mujer de un millonario tejano que iba con su hija a Dallas cuando ocurrió el accidente.

Avery, fracasada en su profesión y sin familia, no tiene nada que perder y si mucho que ganar con ese malentendido y y, en lugar de deshacerlo, acepta someterse a una operación de cirugía reconstructiva que la devuelve toda la belleza perdida de Carole Rutledge.

Ahora, con su nueva identidad, que incluye un marido que la detesta y que esta a punto de presentar la candidatura al Senado, se vera súbitamente en el centro del torbellino de violentas pasiones eróticas y de mortíferas ambiciones políticas.

OPINIÓN PERSONAL:


Hace tiempo que llevo dándole vueltas a si leer este libro o no, siempre me negaba a leerlo por la trama tan rocambolesca que tiene, pero como la Brown tiene el poder de convertir a las historias más raras en tramas fantásticas y trepidantes, me animé finalmente a cogerlo.
Para empezar, aunque se reditó hace poco es un libro de los 80 por lo que la manera de escribir de la autora también se acerca más al estilo de narrar de sus primeros libros que los que publica ahora.
Avery es una periodista joven y huérfana que tras un escándalo que casi acaba con su carrera se pone a trabajar en una cadena de Texas  en el que trabaja el hombre que la crio como si fuera un padre para ella.

Cuando el avión en el que viaja se estrella antes de despegar, ella consigue salvarse y salvara a la niña que se sentaba a su lado, pero las quemaduras de Avery son tan grabes que cuando llega al hospital al confunden con Carole Rutledge , la madre de la niña a la que salvó y la esposa del candidato al senado, Tate Rutledge.

Las primeras semanas de Avery en el hospital gravemente herida tiene que soportar ver como la confunden con Carole y la preparan para la cirugía plástica, sin poder hacer nada convirtiéndose así en Carole al menos en apariencia, pero mientras está en cuidados intensivos recibe una visita que le dice que el plan de matar a Tate sigue adelante. Avery escucha la voz pero no ve la cara y además las visitas a esa zona del hospital son sólo de la familia, por lo tanto se da cuenta de que Carole y algún pariente de Tate conspiraban para asesinarlo.

Carole era una mala persona, infiel a su marido, descuidada y negligente con su hija de tres años, cruel con la gente en general, egoísta y vanidosa. Su matrimonio con Tate hacía aguas por todos lados y este pretendía separarse de ella en cuanto pasaran las elecciones. Y aunque siente pena por ver como sale del accidente y lo que tiene que pasar los meses posteriores de recuperación, no se traga ese cambio tan brusco de comportamiento y la manera de ser de Carole, piensa que es otra de sus estrategias, por lo que la trata fríamente e intenta mantenerla a distancia.

Pero una vez en casa, los cambios de Carole-Avery, son cada vez más grandes y evidentes, la manera en que se acerca y cuida de Mandy y como empieza a ser más amable con la familia de Tate e intenta ganarse la confianza de este último hacen que todos recelen de sus intenciones, mientras la atracción entre Avery t Tate crece cada vez más.

Aquí llega cuando digo lo que me pareció mal del libro. Cualquiera al leer la sipnosis y ver lo original de la trama, pensaría que es eso lo que no me ha convencido de la historia, pero no, la que me amargó el libro fue Avery, porque para mi no deja de ser una oportunista con poca conciencia.

Vale que cuando le hacen la cirugía plástica ella no tiene modo de decir que no es Carole, pero cuando ya puede escribir y comunicarse decide seguir con la farsa, al menos de “momento”, según ella por motivos profesionales, pues ve en toda esa historia un buen reportaje que le volverá a dar prestigio a su carrera y de paso salvar a Tate del asesino que quiere acabar con él. Pero lo que es evidente para cualquiera es que decide ser Carole porque desde el momento que puede enfocar a Tate se queda coladita por él. NO tiene escrúpulos en suplantar el nombre de su esposa, ni a la hora de arrimarse a él e intentar que la quiera, no le importa hacerse con la vida de esta como madre de Mandy. Para mi lo hace de una manera tan fría que hasta parece un poco enfermizo como intenta defenderse de las acusaciones que Tate le hace de cosas que la verdadera Carole cometió, o como llora y se siente dolida cuando este se muestra frío.


Por lo que , la historia aún  con una trama tan original, es buena, tal vez se pase un poco con tanta campaña política para Tate y con el vocabulario soez de algunos personajes, pero el misterio está asegurado hasta el final.

Pero Avery ni me fue creíble ni simpática. Su amor instantáneo hacia Tate hasta es comprensible al pasarse tantos meses grabe en un hospital viendo sólo su cara todos los días, pero no hasta el punto de hacer todo lo que hace para quedarse a su lado e intentar que la ame.

En definitiva, aunque me gusta la autora, con este libro no me ha terminado de convencer, la trama aunque bien hilvanada es bastante peliculera, y ya no me queda nada que decir de Avery. La historia transcurre  entre la frenética carrera hacia las elecciones al senado y la investigación de Avery por descubrir al asesino.

Regular

2 comentarios:

Maribel dijo...

Leí este libro hace ya unos años y me sorprendió, no es de mis favoritos, pero su trama me gustó y eso que Sandra brown no me llama mucho la atención.

Besos...

Ana dijo...

A mi lo que no me gustó fue los motivos o la actitud de Avery, la historia en si, no estaba mal.
Un besito